📖 La minería en lo que hoy es Argentina comenzó mucho antes de que existiera nuestro país. Durante la época colonial, cuando estas tierras formaban parte del Virreinato del Río de la Plata, la minería no tuvo el mismo desarrollo que en otras regiones como México o Perú, donde se encontraron enormes yacimientos de oro y plata. Sin embargo, también aquí se realizaron actividades mineras desde muy temprano.

Antes del primer reglamento minero (1813)

En la etapa colonial, la minería se organizaba bajo las leyes españolas, especialmente las llamadas Ordenanzas de Minería de 1783, que eran aplicadas en todo el Imperio. En estas tierras, las actividades mineras eran escasas, en parte porque no se habían encontrado grandes yacimientos, y en parte por la falta de caminos, herramientas y capital para invertir.

Aun así, ya se extraían algunos minerales en pequeñas explotaciones. Por ejemplo:

  • En la provincia de Córdoba, en el siglo XVII, se explotaban vetas de plomo, cobre y plata en zonas como La Carolina (actualmente en San Luis).
  • En Catamarca, había antecedentes de extracción de oro y plata en la zona de Andalgalá.
  • En Jujuy y Salta, se conocían minas de plomo y azufre, además de la existencia de salinas.
  • En Mendoza y San Juan, se buscaban metales y también se explotaban rocas como la caliza para uso en la construcción.

Estas explotaciones eran muy rudimentarias, con trabajo manual y a pequeña escala. En muchos casos, los minerales se usaban localmente o se vendían en pequeñas cantidades.

El Reglamento de 1813 y los primeros desarrollos

📜 En 1813, ya en tiempos revolucionarios, la Asamblea del Año XIII aprobó el primer reglamento minero del territorio, con el objetivo de fomentar la minería y dar un marco legal propio. Este fue un paso importante hacia una política minera nacional, aunque el desarrollo fue lento.

A lo largo del siglo XIX se registraron algunos hitos importantes:

  • En La Carolina (San Luis) funcionó una de las primeras minas de oro argentinas con cierta organización, y allí trabajaron técnicos alemanes traídos por el gobierno.
  • En Famatina (La Rioja) se desarrolló la minería de oro, plata y cobre, con cierta continuidad a lo largo del siglo.
  • En Patagonia, hacia fines del siglo XIX, se iniciaron exploraciones de carbón en Río Turbio, aunque la explotación sistemática llegaría más tarde.
  • También hubo actividad salinera importante en La Pampa, Buenos Aires y el norte argentino, donde la sal era un recurso estratégico para conservar alimentos.

Durante esta etapa, muchos proyectos mineros eran impulsados por el Estado o por empresarios extranjeros, pero no siempre prosperaban por las dificultades del transporte, la falta de tecnologías y la inestabilidad política del país.

Un proceso lento pero constante

📌 Aunque la minería argentina no tuvo un crecimiento explosivo en el siglo XIX, sí se fue consolidando como una actividad presente en distintas regiones del país. A partir de 1880, con la organización nacional y la expansión del ferrocarril, se abrieron nuevas posibilidades para transportar minerales y desarrollar la industria extractiva.
Este proceso continuaría durante el siglo XX, cuando se descubrirían los grandes yacimientos de oro, plata, cobre, litio y otros minerales que hoy conocemos.